Leche de avena
La avena es una gramínea increíblemente completa y muy interesante de incluir en nuestra alimentación. A mí me encanta usarla en galletas, muesli, o unas simples gachas para desayunar. Es rica en proteínas, grasas insaturadas (las buenas), acido linoleico y vitaminas y minerales. Hidratos de carbono de fácil absorción (mucha energía útil), sodio, potasio, calcio, fósforo, magnesio, hierro, zinc y cobre. Vitaminas B1, B2, B3, B6 y E. Como véis un pedazo de combo. También tiene mucha fibra si la tomáis en copos, en esta receta la fibra se queda fuera, sorry. Tiene un poco de gluten así que no es apta para celíacos pero si para intolerantes a la lactosa, o alérgicos a la leche. Wikipedia dixit.
La cuestión es que llevo tiempo dándole vueltas a la idea de dejar la leche. No es mi intención convencer a nadie ni entrar en debates, pero lo cierto es que opino que la leche en si no es algo especialmente saludable. Me parece que tomar leche es algo como un poco autoimpuesto. No es una necesidad natural, el calcio se encuentra en multitud de alimentos en muchisima mayor cantidad. Dejando aparte que tiene muchísimas calorías y grasas animales. Ultimamente miro las calorías de todo y resulta que un vaso de leche entera tiene más o menos las mismas calorías que un paquete de palomitas de estas que parecen risis grande. Y además es que no me sienta especialmente bien. Así que llevo tiempo intentando dejarla. Dificil, porque me fascinan el queso y la mantequilla. Y el café. Que así de buenas a primeras uno piensa que la leche es muy fácil sustituirla pero nada de eso. Aunque no seas fan de la leche, la tomas indirectamente en muchas cosas. Y quien más o quien menos se toma de vez en cuando una taza de leche con cereales, con colacao, con miel...y sustituir, ya no la leche de vaca, sustituir esos rituales es dificil. Por ejemplo, si eres fan del café con leche, qué le echas al café para que no sea tan negraco? Dificil, dificil, todo un reto personal. Había probado las tipicas leche comerciales, arroz, soja, avellanas, y la que más me gustaba de todas era la de avena. Cuando la tomas sola parece un batidito suave o una horchata. Cuando se la pones al café le da un toque muy bueno. Y anoche me la tomé con miel y parecía que estaba tomando leche normal, porque sabía a miel y la textura era identica a la de la leche entera.
¿Cuál es el problema de estas leches comerciales? Que son CARAS. Pero caras de narices. El último tetrabrik que compré me costó 2,49 euros y fue el más barato que encontré con diferencia. Así que estaba un poco atascada hasta que Inés me dijo que era muy fácil hacerla en casa. Y ahí estuve investigando hasta que ayer me animé y la hice. Y estoy ENCANTADA con el resultado. Sale baratísima y está deliciosa. En serio, aunque no queráis dejar la leche deberíais probarla.
Ingredientes.
- Una taza de copos de avena.
- Tres tazas de agua mineral.
- Una pizca de sal.
- Dos cucharadas de azúcar (yo usé azúcar moreno)
- Dos cucharaditas de extracto de vainilla (opcional)
El procedimiento es bien sencillo. Ponemos los copos de avena a remojar en el agua durante aproximadamente una hora. Pasado este tiempo lo ponemos en el vaso de la batidora americana (supongo que con una batidora de inmersión también saldrá) y trituramos. Una vez triturado solo queda filtrar los trocitos de avena. Yo lo hice primero con un colador muy fino, pero quedaron pizquitos. Así que lo volví a filtrar con un trapo limpito y finito. Una vez filtrado todo, añadís la sal (para potencias el sabor de la avena), el azúcar (también podéis dejarlo sin azúcar y echaros la que queráis al servir) y el extracto de vainilla y mezclais bien. Y ya está, lista para tomar. ¿Fácil, o qué?
Bueno, falta un paso que yo hice pero es opcional. Todavía estoy investigando las cantidades, y la textura deseada puede ser un poco al gusto de cada uno. Si os queda demasiado aguada (a mí me pasó, pero es que empecé con muy poca avena ) solo tenéis que añadirle más y repetir el proceso. Si os queda demasiado espesa (a mí me pasó, porque al ir a corregir me pasé), pues al final le añadís un poquito de agua y ya está. Es muy fácil de corregir. De hecho es mejor que os quede espesa que si queda aguada que no estaba nada buena. Yo la dejé como si fuera leche entera.
A ver si os animáis, que está chupada y es muy sana.
PD: Con los restos de avena que quedan tras filtrar parece ser que pueden hacerse patés vegetales, o inculso hamburguesas. Yo voy a intentar hacer esto último, total, no hay nada que perder!