Galletas con mensaje
Etiquetas: dificultad media, dulces, galletas, ocasiones especiales, vegetariano
Bueno, no sé bien si empezar presentándome o dejar que la receta hable por mí.
Venga, voy a ser educada (por una vez) y contaros un poco quién soy y qué vais a leer aquí de mi pluma.
Me llamo Inés (sí, mi nick no es el colmo de la originalidad, pero ayuda a ganar en anonimato, que pierdo con el avatar, claro) y suelo escribir aquí mis idas de olla. Pero eso seguro que ya lo sabéis. Y si no, mmm, igual ni os merece la pena pasaros por allí. Cocino mucho (me gusta y, aunque esté mal que yo lo diga, no se me da mal), pero como vivo sola, cocino para uno y normalmente cosas rapiditas.
Entre mis recetas, encontraréis muchos (¡muchos!) dulces (soy una golosa empedernida), pero intentaré mantener también un recetario de cenas fáciles, rápidas (unos 20 minutos) y ricas, para el día a día. Habrá recetas propias, de libros, de internet (algunos de mis blogs de referencia están ahí a la derecha... Sí, tenéis que echarles un ojo. O dos.). Y también quiero escribir alguna entrada de técnicas y consejos, que creo que siempre vienen bien. En cuanto a dificultad, de todo un poco. Habrá fotos y, sobre todo, mucho cariño.
Vamos con la receta.
- 175g de harina
- 115g de mantequilla blandita
- 150g de azúcar moreno
- 25g de azúcar blanco
- 1 yema de huevo
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 1/2 cucharadita de sal
- Colorante rojo en gel o líquido
- Azúcar glass para espolvorear
Tiempo de preparación (aproximado):
- En un bol, mezclar la harina con la sal y el bicarbonato.
- Separar la clara de la yema de huevo y añadir la vainilla a la yema. Conservar la clara para otro uso.
- En otro bol, batir la mantequilla con los dos tipos de azúcar hasta que esté cremosa.
- Añadir la yema de huevo con la vainilla, batiendo bien después de añadirla.
- Incorporar la harina sin batir, con la espátula de goma
- Separar en torno a 1/5 de la masa y añadir colorante hasta lograr el color buscado.*
- Dejar reposar las dos masas 1h en la nevera.
- Precalentar el horno a 175ºC. Forrar una bandeja de horno con papel parafinado.
- Sacar la masa de la nevera y hacer bolitas de unos 2.5 cm de diámetro (o unos 20-25 gramos).
- Aplanarlas con un vaso de fondo plano, (pasado con harina para evitar que se pegue), hasta que tengan un grosor de unos 8mm.
- Colocar en la bandeja de horno, dejando espacio entre ellas (a mí me caben unas 12 galletas por hornada).
- Espolvoreando con azúcar glass para evitar que se pegue, extender la masa coloreada hasta un grosor de unos 3-5mm.
- Recortar con un cortapastas o con un cuchillo afilado.
- Colocar sobre la masa aplanada y presionando suavemente con la palma de la mano, incrustar las formas coloreadas en la masa lisa.
- Hornear entre 10 y 14 minutos, hasta que estén ligeramente doradas en los bordes.
- Dejar templar antes de pasar a la rejilla para enfriar completamente.
- Repetir con el resto de las galletas.
* Como la parte coloreada me parece que resulta demasiado dulce, la próxima vez que las haga (porque las voy a volver a hacer, están así de buenas), voy a sustituir el colorante y el azúcar glass por unos 30-40 g de cacao en polvo. No serán tan sanvalentineras, pero me parece que van a estar mucho más ricas.
Perdón por los problemas de maquetación... Blogger se pone tonto con las fotos.